La frontera feminicida: una realidad entre el Edomex y la CDMX

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] La frontera feminicida favorece las condiciones para que miles de mujeres (quienes transitan a diario por espacios públicos entre el Edomex y la CDMX en busca de oportunidades de empleo, de educación, en resumen, de una vida digna) padezcan –cotidiana y exacerbadamente- diversas formas de violencia de género en su contra debido al alto grado de vulnerabilidad al que están expuestas en este espacio geográficamente fronterizo. [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] 11 de abril de 2019 Por: Equipo CDHVitoria Desde esta primera línea, afirmaremos categóricamente lo siguiente: la violencia de género contra las niñas, las adolescentes y las mujeres es una de las violaciones más graves a los derechos humanos y un motivo de vergüenza para nuestras sociedades, un obstáculo para el desarrollo inclusivo, equitativo y sostenible. Las niñas, las adolescentes y las mujeres mexicanas, sin importar su origen, edad, condición social, religión, identidad de género u orientación sexual, entre otras tantas variables, no sólo están expuestas, sino que padecen diversos tipos de violencia feminicida: a) por varias razones: el sexismo, el machismo, la misoginia, la desigualdad, la discriminación de género, y fortalecida por la situación de pobreza, la pertenencia étnica, la condición de discapacidad, el estatus migratorio, etcétera, etcétera, etcétera; b) en numerosos ámbitos: el hogar, la escuela, el trabajo, el ciberespacio… el espacio público, y también de forma muy acentuada en regiones como las fronteras geográficas entre una entidad y otra, una de ellas, entre el Edomex y la CDMX. Desde hace varias semanas, personas académicas, defensoras y activistas, así como colectivos, están retomando la discusión de una realidad que nosotras a partir de una lectura atenta de numerosos signos feminicidas(1) también hemos reconocido y en nuestra manera muy particular, hemos denominado “frontera feminicida”, entendiéndola como: Una gran parte del espacio público geográficamente fronterizo entre el Edomex y la CDMX, donde existe violencia ejercida contra las mujeres por razones de género (es decir, por el solo hecho de ser y/o identificarse como mujeres), la cual es perpetrada principalmente por varones cisgénero y concretizada en conductas y/o acciones diversas que les causan daños y repercusiones, entre ellos: físicos, psicosociales, sexuales, jurídicos, políticos y económicos; violencia que, si es llevada a su extremo, puede llegar a su forma más radical: el feminicidio, esto es, los asesinatos de mujeres motivados por el patriarcado. Después de examinar concienzudamente los aportes de varias personas académicas, de revisar minuciosamente la geo-estadística feminicida a nivel nacional, estatal y municipal, de analizar cuidadosamente la coyuntura feminicida actual desde varias perspectivas, de valorar profundamente los múltiples efectos de la violencia de género contra las mujeres, en fin, de leer los signos feminicidas que ya mencionabamos, constatamos la existencia de una frontera feminicida entre el Edomex y la CDMX, ya no como una mera hipótesis de investigación, ¡sino como una realidad que pide a gritos nuestra atención! Ahora bien, ¿por qué estamos dirigiendo nuestra atención a la frontera feminicida?, ¿qué propósitos perseguimos? Respondamos al “por qué” y al “para qué” de la frontera feminicida así: 1. Porque la frontera feminicida favorece las condiciones para que miles de mujeres (quienes transitan a diario por espacios públicos entre el Edomex y la CDMX en busca de oportunidades de empleo, de educación, en resumen, de una vida digna) padezcan –cotidiana y exacerbadamente- diversas formas de violencia de género en su contra, únicamente por razones de género, debido al alto grado de vulnerabilidad al que están expuestas en este espacio geográficamente fronterizo. 2. Para enfrentar y erradicar la violencia de género contra las mujeres en la frontera feminicida, y no sólo mediante medidas paliativas , sino desde la raíz, es decir, a través de mecanismos como la coordinación interestatal a nivel de procuración de justicia, de la declaratoria de la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres (AVGM) en todas las alcaldías de la CDMX, de la segunda AVGM en siete municipios del Edomex y de las consecuencias que las implementaciones adecuadas de las Alertas podrían traer consigo en ambas entidades. Por lo tanto, ya que apostamos a la construcción de un mundo más justo y digno para todas y todos, apostemos para que, por un lado, la violencia de género contra las mujeres en la frontera feminicida sea enfrentada y erradicada, y por el otro, sean respetados, protegidos, promovidos y garantizados los derechos humanos de las miles de niñas, adolescentes y mujeres que transitan entre el Edomex y la CDMX. Estamos completamente convencidas de que no daremos ni un paso atrás y seguiremos insistiendo en luchas hombro con hombro junto a miles de mujeres que han gritado en todos los espacios, públicos y privados, la urgencia de detener la violencia feminicida. 1 | Estos signos son manifestaciones concretas de la violencia feminicida que van desde actitudes hasta acciones que pueden culminar en feminicidios [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] Consultar artículo en Animal Político. Imagen destacada: Queso Rayones [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_PostCarousel_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget]
Premio Sergio Méndez Arceo

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] El trabajo en la defensa de los DH requiere un constante compromiso, por eso desde hace 27 años algunas organizaciones de inspiración cristiana han acompañado el reconocimiento y visibilización de personas y colectividades mediante el Premio Nacional de Derechos Humanos Sergio Méndez Arceo [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] Sábado 13 de abril de 2019 Miguel Concha El trabajo en la defensa de derechos humanos requiere de un constante compromiso y fortaleza para la construcción de un mundo más justo. Razón por la cual desde hace 27 años algunas organizaciones de inspiración cristiana han acompañado el reconocimiento y visibilización de personas y colectividades que defienden derechos humanos, mediante el Premio Nacional de Derechos Humanos Sergio Méndez Arceo. Cada año éste reconoce a diferentes personas, colectividades u organizaciones que desde su praxis fortalecen experiencias comunitarias e individuales, dentro de cada coyuntura política particular. Este año por ejemplo resalta la coyuntura de un nuevo gobierno, que entre las múltiples interrogantes que suscita destaca aquella que nos hace reflexionar sobre el ejercicio de los derechos humanos y el respeto y protección de quienes los defienden. Al respecto es importante tomar en cuenta que es menester reconocer que, aunque México tiene un nuevo gobierno, existen otras formas de hacer y pensar en la izquierda, entre ellas las que apuestan a la defensa de la tierra y el territorio frente a megaproyectos. Como segundo elemento, es también importante no dejar de nombrar que el número de personas defensoras y periodistas asesinadas sigue arrojando cifras elevadas. Pensar entonces el ejercicio de los derechos humanos, así como la protección de quienes los defienden, implica reconocer que hay ciertos derechos que se ven garantizados, porque están de acuerdo con las propuestas políticas del nuevo gobierno. Pero también hay otros que parecen contraponerse con dichas propuestas. Ante ello, es importante no olvidar los principios en derechos humanos, que nos invitan a considerar su interdependencia y progresividad. La emisión número 27 del Premio Sergio Méndez Arceo, que hoy se entrega en Cuernavaca, se posiciona ante la coyuntura, y reconoce en la categoría individual a Teresa Castellanos Ruiz, y en la grupal a Tequio Jurídico AC. Teresa Castellanos Ruiz es una mujer que acompaña actualmente la lucha contra el Proyecto Integral Morelos, defendiendo los derechos a la vida, la salud, el medio ambiente sano, la libre determinación de los pueblos, el agua, y una vida libre de violencia para las mujeres. Como coordinadora del Comité Huexca en Resistencia, inició su camino en 2011 en la defensa de los derechos humanos, ante la indignación y preocupación por la vulneración de su calidad de vida, la de sus hijas y la de su comunidad, a raíz de la construcción de una central termoeléctrica en Huexca, al nororiente de Morelos. Cuando la comunidad recibió la información de que una planta de esa magnitud se construiría en su localidad, las y los pobladores decidieron hacer un plantón que duró casi seis meses, hasta que fue reprimido por policías. Teresa, junto con otras compañeras, fue agredida físicamente. No obstante dicha represión, Teresa ha continuado en la defensa de su territorio, fungiendo también como mediadora de paz entre las y los habitantes de las comunidades que han experimentado diferentes actos de hostigamiento y división por parte de la CFE. Participa también activamente en diferentes espacios para vincular a los pueblos del estado de Morelos en resistencia a la imposición de megaproyectos, en la defensa de su territorio y sus recursos naturales. Lo cual la ha llevado a enfrentar una serie de hechos, producto de la violencia de género que las defensoras suelen experimentar, al ser leídas como mujeres en un sistema patriarcal. Lección que le ha permitido alzar la voz no sólo en defensa de su territorio, sino también de las mujeres que lo habitan. Tequio Jurídico por su parte nació a finales de 1997, por iniciativa de estudiantes de Derecho, pertenecientes a diferentes pueblos indígenas. Su motivación fue el compromiso con el trabajo comunitario y con los derechos individuales y colectivos de los pueblos indígenas. Se inspiran en las luchas de las comunidades zapatistas, y su trabajo se centra en generar e implementar estrategias de formación, capacitación, investigación, difusión, asesoría y defensa jurídica, con el fin de aumentar las capacidades y habilidades organizativas de las comunidades, asambleas, autoridades agrarias y municipales, defensoras y defensores del territorio indígena, así como en la difusión de los derechos de las mujeres indígenas, la búsqueda de espacios que permitan el intercambio, y el rescate de los elementos de identidad indígena. Mediante acciones legales contra proyectos mineros que las amenazan, acompañan procesos de organización regional en comunidades que realizan la defensa del territorio chontal. Viven el tequio como práctica de un derecho colectivo que se funda en la cosmovisión de los pueblos, y tiene como fin el beneficio comunitario y la construcción de su autonomía. Su lema, Desde abajo y en la tierra sembramos autonomía, hace frente al capitalismo neoliberal que se sostiene en el despojo, la represión, la explotación y la discriminación en todas sus formas. Consultar artículo en La Jornada. Imagen destacada : Sergio Méndez [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_PostCarousel_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget]
Por una verdadera justicia para todas las víctimas del país | Resultados del 2do Encuentro Internacional de Defensores y Víctimas de Graves violaciones a los DH en Arantepacua, Michoacán

Notable asistencia de víctimas, colectivos de víctimas, sobrevivientes de graves violaciones a derechos humanos, organizaciones y movimientos sociales. Asistentes al encuentro refrendan la importancia de movilizarse y tener una participación efectiva en los procesos de verdad, justicia, reparación integral y medidas de no repetición. Acuerdos adoptados en el Segundo Encuentro se refieren a acciones concretas para impulsar procesos para el acceso a la verdad, justicia, reparación integral y medidas de no repetición. El 3, 4 y 5 de abril de 2019 tuvo lugar el Segundo Encuentro Internacional de Defensores y Víctimas de Graves Violaciones a Derechos Humanos “Por una verdadera justicia para todas las víctimas del país”, en Arantepacua, Michoacán. El evento se hizo en seguimiento al trabajo conjunto que comenzó a tejerse en noviembre de 2018 en el Primer Encuentro Internacional de Defensores y Víctimas de Graves Violaciones a Derechos Humanos “Por la construcción de una justicia transicional que considere a todas las víctimas del país” Nochixtlán, Oaxaca. En este segundo Encuentro, participaron más de 60 referentes de distintas luchas y de casos de violaciones graves a derechos humanos. Además estuvieron presentes personas de la academia, estudiantes e integrantes de organizaciones y movimientos sociales provenientes de los estados de Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Puebla, Veracruz, Estado de México, Tlaxcala y Ciudad de México, así como de diversos países. Este segundo encuentro tuvo como objetivo conmemorar en Arantepacua el Segundo Aniversario del ataque a la Comunidad Purépecha el 4 y 5 de abril de 2017, recordar a las víctimas del ataque y generar una plataforma de entretejido entre movimientos de víctimas y sobrevivientes, personas defensoras, organizaciones de la sociedad civil, académicas, al igual que organizaciones sociales y referentes y así impulsar en conjunto los procesos de verdad, justicia, reparación integral y medidas de no repetición. A partir de las mesas del Encuentro en las que se abordaron experiencias pasadas de búsqueda de la verdad en México con integrantes de la Comisión de la Verdad del Estado de Oaxaca experiencias de autogestión, los retos a partir del cambio de gobierno, los mecanismos efectivos de participación de las víctimas y el análisis de los horizontes políticos de las víctimas y de sus colectivas, se refrendó la importancia de la centralidad de las víctimas y la necesidad de seguir encontrándonos y movilizándonos. En ese sentido, los acuerdos a los que llegamos están enfocados a fortalecer los procesos organizativos e impulsar acciones para que el gobierno garantice a las víctimas el acceso a la versad, justicia, reparación integral y medidas de no repetición. Algunos de los acuerdos adoptados son: Una movilización de colectivos de víctimas, víctimas y sobrevivientes de todo el país el día 24 de abril en la Ciudad de México. La convocatoria será amplia no se limitará a los participantes del Segundo Encuentro de Arantepacua. Creación de una campaña de visibilización de víctimas de graves violaciones de derechos humanos con alcance nacional e internacional. Continuar el trabajo estratégicamente mediante comisiones de trabajo que profundizarán en el análisis de casos, para impulsar una agenda amplia que cobije a los distintos grupos de víctimas. Elaboración de una metodología que permita transversalizar la perspectiva de género y visibilizar las violencias en contra de las mujeres, por lo cual se generarán los espacios necesarios que aseguren la participación efectiva de las víctimas. Las diversas personas que han padecido violaciones a derechos humanos, colectivos de víctimas y sobrevivientes, organizaciones defensoras de derechos humanos y movimientos sociales confirmaron la profunda necesidad que existe en México para que todas las víctimas y sobrevivientes sean atendidas efectiva e integralmente. La crisis de derechos humanos continúa y es urgente que esta atención se prioridad para el gobierno actual. Asimismo, quienes se reunieron en Arantepacua confirmamos el legítimo uso de la movilización y organización social para hacer efectivos sus derechos como víctimas reconocidos en el ámbito nacional e internacional. ATENTAMENTE Consejo de Gobierno Comunal Indígena de Arantepacua Comité de Víctimas por Justicia y Verdad 19 de Junio (COVIC) Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria (CDHVITORIA) Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) Sección XXII – Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación Comisión Magisterial de Derechos Humanos sección XXII (COMADH) Encuentro Nacional por la Unidad del Pueblo Mexicano (ENUPM) Defensoría de los Derechos Humanos por la Justicia A.C. (DDHHJUSTICIA) Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca Centro de Derechos Humanos Bartolomé Carrasco Briseño (BARCA) Liga de Juristas “26 de septiembre” A. C. Coordinación de Familiares de Estudiantes Víctimas de Violencia Colectivo Liquidámbar Centro de Derechos Humanos Antonio Esteban (CDH ANTONIO ESTEBAN) Coordinadora Nacional Plan de Ayala Movimiento Nacional (CNPA MN) Unión General de Trabajadores de México (UGTM) Empatikka Movimiento de Unificación y Lucha Triqui Independiente (MULTI) Imagen destacada: CDH Antonio Esteban | Utopía 21
La nueva relación gobierno-sociedad en la 4 T

Representantes de organizaciones de la sociedad civil se reúnen para definir una nueva estrategia en la relación con el gobierno Consideran que las declaraciones del nuevo gobierno las debilitan y desacreditan ante la opinión pública y las personas con las que trabajan Defienden su derecho a asociarse y expresarse con libertad y a continuar trabajando en favor de la democracia, el desarrollo y los derechos humanos Demandan el respeto al marco jurídico, institucional y fiscal que norma su constitución y sus actividades Exigen el fortalecimiento de los mecanismos de participación social y de incidencia en lo público El pasado 9 de abril tuvo lugar el Foro LA NUEVA RELACIÓN GOBIERNO- SOCIEDAD EN LA 4T, convocado por más de 20 organizaciones, con el objetivo de realizar un debate entre actores de la sociedad civil para una nueva relación sociedad-gobierno, en el marco de la gobernanza, con una participación de cerca de 100 representantes de sociedad civil. El Foro se desarrolló en tres momentos: i) Encuadre general del propósito del Foro y una ponencia introductoria de la trayectoria, aportes y evolución de las OSC; ii) Cuatro Mesas Temáticas, para propiciar el debate entre las y los participantes y definir estrategias desde la sociedad civil, a partir del entorno que percibimos en la actual coyuntura nacional, y iii) Sesión Plenaria de cierre para presentar las estrategias y medidas prioritarias de las OSC y concertar acciones conjuntas para la construcción de una nueva relación sociedad-gobierno. En la apertura Miguel Concha Malo del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, afirmó que el Foro que realizamos entre muy diversas OSC, responde a las actuales y complicadas circunstancias en que nos ha colocado las declaraciones y decisiones del gobierno actual, que nos preocupan, desacreditan y debilitan ante la opinión pública y los grupos-personas con las que trabajamos, así como ante las instancias que históricamente nos han reconocido y han sido solidarias con nuestro trabajo comprometido a favor de la democracia, el desarrollo y la defensa de los derechos humanos. Fue por ello que nos animamos a realizar un Foro con el objetivo de sostener un debate entre actores de la sociedad civil, sobre el trayecto, entorno, aportes y desafíos de las OSC, orientado a generar escenarios y estrategias para la construcción conjunta de una nueva relación sociedadgobierno, en el marco de la gobernanza. La construcción de esa nueva relación, considerando el anuncio y horizonte del Presidente del país, de una profunda transformación en el país (la 4T), no la imaginamos sin la participación activa y cualitativa de la sociedad civil que mucho tiene que aportar desde su experiencia, especificidades y compromiso social. Por tanto, afirmó Miguel Concha, nuestra expectativa –más allá del diagnóstico- es que en este Foro avancemos y consigamos definir acciones, medidas y estrategias conjuntas como sociedad civil, para hacer frente a las circunstancias actuales y contrarrestar los impactos de las decisiones de gobierno y construir escenarios viables para una relación novedosa sociedad-gobierno que sea un componente fundamental en el tránsito hacia la cuarta transformación. Clara Jusidman, fundadora de Incide Social por su parte, expresó que estamos frente a una forma distinta de ejercer el poder en donde los ciudadanos organizados parece que no tenemos cabida. Por ello, el reto que tenemos no es el de ver cómo convencemos a los ideólogos de la 4T que somos buenas, que hacemos el bien, que nos preocupamos por el bienestar de las personas y defendemos sus derechos, que aportamos una enorme cantidad de horas de trabajo voluntario, que hacemos trabajos que el estado es incapaz de llevar a cabo por su enorme tamaño y por su lentitud de respuesta ante problemáticas emergentes, que merecemos un ambiente propicio para desarrollarnos, que tenemos derecho a acceder a recursos públicos, que el Estado mexicano tiene compromisos internacionales vinculatorios que le obligan a trabajar y apoyar a las organizaciones de la sociedad civil. Planteó que debemos pensar cómo continuamos defendiendo y preservando nuestro derecho a asociarnos y a expresarnos con libertad, cómo construimos sinergias y nos apoyamos, como hacemos visible nuestro trabajo y nuestra contribución al bienestar entre la población, cómo ampliamos el número de ciudadanos organizados y empoderados, cómo reproducimos nuestro trabajo en beneficio de las personas. Por tanto este foro nos brinda la oportunidad de ubicarnos correctamente frente a lo que está ocurriendo en términos de ruptura de paradigmas y cambio de régimen para evitar que la gran avalancha nos destruya y desanime y en cambio nos permita seguir contribuyendo, seguir participando, seguir exigiendo. En la ponencia introductoria del Foro, el investigador y activista Rafael Reygadas, entre otras tesis, planteó que las OSC somos parte de una extensa sociedad civil que ha resistido el autoritarismo del partido de estado y el ascenso del neoliberalismo, representando a la vez procesos de resistencia a megaproyectos y a la violación de los derechos humanos, a la vez que hemos generado nuevas instituciones y contribuido a hacer posible la realización de las elecciones en que se respetara el voto ciudadano en 2018. Como en las sociedades actuales, las OSC en México formamos parte de la gobernabilidad democrática de una sociedad moderna, que además de resistir, genera, propone e inventa rutas y metodologías autónomas y proyectos alternativos en los más variados terrenos de la sociedad mexicana actual. La 4ª T –afirmó Reygadas- no puede lograr sus objetivos sin la participación autónoma, crítica, solidaria y creativa de las OSC que trabajan por alternativas ante problemas que el gobierno por sí solo no puede resolver, ni bastan los programas de renta universal para sectores en exclusión y vulnerados. Entre los aportes de las organizaciones participantes en el Foro se afirmó que descalificar a las organizaciones de la sociedad que han sostenido luchas y principios, afirmar que la mayoría son conservadoras, cercanas a los consorcios empresariales y que no están en la izquierda, revela o un poco creíble desconocimiento de la realidad nacional o el ánimo de asumirse como exclusivo representante de los intereses populares, lo que por otro lado no siempre se demuestra en la
Pronunciamiento de apertura del Foro : “Por la construcción de un modelo agroalimentario con alimentos campesinos para todas y todos”

Urge hacer realidad el derecho universal a una alimentación nutritiva, suficiente y de calidad como lo señala la Constitución; y que éste, sea garantizado por el Estado mediante el desarrollo rural integral y sustentable. Conminamos al nuevo gobierno a la construcción de un modelo agroalimentario donde las personas, los sujetos colectivos, los ejidos y las comunidades sean el centro de las nuevas políticas hacia el campo y están representados en el Plan Nacional de Desarrollo. Rescatemos a la madre tierra, la economía campesina, los alimentos frescos, locales y saludables; el maíz mexicano y la tortilla de calidad. La Campaña Nacional Sin Maíz No hay País cumple 12 años. Desde entonces , hicimos el llamado a “poner a México en la boca”, ante la urgente necesidad de revalorar el campo mexicano, dignificar a quienes producen los alimentos y preguntarnos cómo nos alimentamos, buscábamos llamar la atención del gobierno frente a la liberalización total del maíz, frijol, azúcar y leche en polvo que permite el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Este llamado no tuvo eco en el gobierno, pero la sociedad mexicana comenzó a hacer conciencia de la importancia de nuestros alimentos y de quienes las producen, las y los campesinos y el campo. En estos años hemos tenido logros muy importantes, entre otros: la inclusión en 2011 del Derecho a la Alimentación en la Constitución Política Mexicana, la suspensión por la vía jurídica de la siembra de maíz transgénico de 2013; y que el Día del maíz se instituyera en septiembre 29 para celebrar a nuestra planta sagrada y a quienes han hecho posible su existencia hasta el día de hoy: las familias campesinas. Además, hemos realizado un sinfín de acciones: siembra de maíz, ferias campesinas, manifestaciones, la gran velada por el maíz, conciertos, etcétera. Hoy, México vive una nueva coyuntura, en la que tenemos un gobierno que ganó democráticamente la presidencia con más de 30 millones de votos. El presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho que el campo debe volver a florecer, “rescatar el campo” para acabar con la pobreza y violencia, señaló que no habrá siembra de transgénicos en México y que se recuperará la autosuficiencia alimentaria. Existe mucha esperanza, pero sabemos que será difícil revertir el desastre provocado por casi 40 años de políticas neoliberales anti campesinas y la Revolución Verde, a favor de las grandes corporaciones en el campo mexicano. Desde la Campaña Nacional Sin Maíz No hay País hemos señalado la urgente necesidad de hacer realidad el derecho universal a la alimentación nutritiva, suficiente y de calidad como lo señala la Constitución; y que éste, sea garantizado por el Estado como también se dice en nuestra Carta Magna: “El desarrollo rural integral y sustentable, también tendrá entre sus fines que el Estado garantice el abasto suficiente y oportuno de los alimentos básicos que la ley establezca”. Para ello, debe establecerse en el Plan Nacional de Desarrollo la prioridad del campo mexicano de producir los alimentos que requerimos las y los mexicanos, antes que para el mercado externo. A la fecha nuestra alimentación depende de la importación y de la agricultura campesina e indígena, a pesar de las políticas neoliberales, produce el 40% de los alimentos que consumimos: la mitad del maíz, frutas, café, entre otros. Las políticas neoliberales sólo han protegido a la agricultura agroexportadora e industrial concentrada en unos cuantos que han ganado millones a costa de los subsidios y de nuestra salud; en tanto que la mayoría de las unidades campesinas e indígenas de producción han sido excluidas de los apoyos gubernamentales e incluso, han sido obligados a la migración. Este modelo nos ha llevado a una grave crisis de alimentación que se refleja en hambre y obesidad. Defenderemos el maíz y la milpa como sistema de cultivo, como forma de vivir y de organizarnos en la diversidad que preserva nuestras raíces culturales, nuestra identidad, nuestra alimentación y nuestra cocina tradicional. Reiteramos que esta es la única salida para desterrar la violencia que desgarra nuestra sociedad y rompe el tejido social de familia, pueblos, comunidades, barrios, ciudades y del país entero. También, contribuye a frenar la migración forzada y el desplazamiento de jóvenes y familias enteras; detiene la absurda muerte por mal comer en la cuna del maíz; y combate el cambio climático al capturar el carbono del medio ambiente y regresarlo a la tierra, contribuyendo a enriquecer el suelo, combatir el calentamiento global y a restaurar la biodiversidad. Combinamos el nuevo gobierno a la construcción de un modelo agroalimentario y nutricional donde las personas, los sujetos colectivos, los ejidos y las comunidades sean el centro de las nuevas políticas hacia el campo y estén representados en el Plan Nacional de Desarrollo y que éste se oriente a reactivar la producción campesina e indígena con el maíz como eje y la milpa como sistema de vida; para lograr que toda la población mexicana tenga una alimentación nutritiva suficiente y de calidad. Mantendremos, de forma organizada y colectiva, la tierra, el territorio y el agua ante la depredación que ocasionan los megaproyectos, que ponen en riesgo los suelos para sembrar, comer y vivir. Tenemos la certeza de que la producción campesina e indígena -de pequeña y mediana escala- preserva la gran agrobiodiversidad del campo mexicano, en particular del maíz nativo pero también el agua, los insectos polinizadores y los bosques; además, representa un modo de vida alternativo al capitalismo, hoy en franca crisis. El derecho a la alimentación se ha ganado por la sociedad y debe asegurar la disponibilidad y la accesibilidad de comida sana a toda la población con equidad y justicia. Las y los campesinos pueden asegurar este derecho con el apoyo decidido del Estado en el marco de sus obligaciones para con los derechos humanos, que también debe combatir los monopolios agroalimentarios para evitar el acaparamiento y la especulación con alimentos, así como la venta de alimentos de pésima calidad. ¡No a los agrotóxicos, no al maíz transgénico! ¡No a la apropiación de las tierras y
Inauguración del Foro: Por un modelo agroalimentario con alimentos campesinos para todas y todos | Participación de Miguel Concha

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] Inauguración del Foro: Por la Construcción de Un nuevo Modelo Agroalimentario de la Campaña Nacional Sin Maíz No Hay País realizado en El Altillo Buenos días a todas las personas aquí presentes. A nuestras compañeras y compañeros de la Campaña Nacional Sin Maíz No Hay País, y a las y los funcionarios que nos acompañan el día de hoy. Aprovecho también para enviar un saludo a todas y a todos ustedes por parte del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, organización integrante de la Campaña Sin Maíz No Hay País. Nos congratulamos mucho por la realización de este Foro, y por encontrarnos con compañeras y compañeros con quienes hemos luchado desde hace más de 10 años por la soberanía alimentaria, una alimentación sana y la recuperación del campo y el maíz nativo. Ser parte de este entretejido de organizaciones y colectividades es un honor para mí y para el Centro Vitoria, pues la Campaña Sin Maíz No Hay País se ha ganado un lugar referencial en la lucha relacionada con la soberanía alimentaria, y ha sido el punto de partida de muchos esfuerzos, locales y nacionales, que hasta la fecha se dedican a la defensa de nuestros maíces criollos y la economía campesina. Esfuerzos, como la articulación de distintas organizaciones campesinas con la sociedad civil, académicas, académicos y colectivos que se dedican a la defensa de los bienes comunes, en torno a la Campaña Nacional Sin Maíz No Hay País, resultan de suma importancia, pues el contexto actual del modelo neoliberal, que avasalla al campo, y nos bombardea con alimentos chatarra que afectan nuestra salud, entre muchas otras de sus afectaciones, sigue haciendo indispensable entretejer nuestras luchas, pero también nuestras esperanzas, para sumar que poco a poco nos dé frutos esta lucha, que hoy requiere de acciones concretas que empujen al cambio del modelo económico. Ahora más que nunca es menester recuperar al campo mexicano y posicionar en la agenda nacional la vida digna de las campesinas y campesinos. La tremenda crisis de derechos humanos que hay en el país tiene como una de sus raíces el abandono del campo; el cual ha sido lentamente invadido por el crimen organizado y por proyectos extractivos de las grandes empresas. La destrucción del tejido social de las comunidades, relacionado con las pocas oportunidades ofrecidas a las y los campesinos, se ha traducido no sólo en desplazamientos del campo a las ciudades, sino en que las manos que pudieran dedicarse al cuidado de la tierra, del maíz, del frijol, del café y otros alimentos básicos de la dieta y cultura mexicanas, hayan sido cooptadas, para defender sus intereses, por los carteles a lo largo y ancho del país. Esto, aunado a la complicidad de autoridades de todos los niveles, y a los megaproyectos que han buscado imponerse en todo el territorio nacional, ha desatado una ola de violencia generalizada que, a un mismo tiempo, usa y afecta a las personas en mayor situación de vulnerabilidad. Por ello, desde la Campaña Sin Maíz No Hay País pensamos que una estrategia posible, de entre tantas otras que pueden tomarse para erradicar la crisis de derechos humanos en México, es generar políticas integrales en torno al campo, en las que se garantice el derecho de las campesinas, campesinos y comunidades indígenas a una vida digna. Políticas dirigidas al mantenimiento de sus usos y costumbres, a su derecho a definir sus propios medios de vida, y a producir para sí mismas y para los demás alimentos sanos y culturalmente aceptables. El campo es la primera línea de defensa de los derechos humanos en México para erradicar la violencia; y para ello es necesario elaborar un nuevo marco de leyes, normas y reglamentos basados en la ética y la protección de los bienes comunes, en los derechos humanos individuales y colectivos a un medio ambiente sano; a una alimentación sana, suficiente y accesible, a la biodiversidad, a la libre circulación natural de las semillas, a la información y a la libre determinación de los pueblos. Una legislación a la altura de un país centro de origen, megadiverso y pluricultural, cuya aplicación se lleve a cabo sin reservas por parte del Ejecutivo, y cuya observancia sea cumplida por el Poder Judicial en todas las sentencias dictadas. Ahora bien, la crisis del campo en México tiene sus raíces en la imposición del sistema económico neoliberal, del cual es expresión ejemplar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. A raíz de la ratificación de este Tratado se priorizó, por ejemplo, la importación de maíz estadunidense, por sobre la producción interna mexicana, disminuyendo los aranceles para este cereal. Tras 25 años de la vigencia del TLCAN, son evidentes los estragos que esta política ha hecho en la producción de maíces criollos, mermando la economía de las y los campesinos, y dejando el mercado abierto a maíz sin nixtamalizar, y a semillas genéticamente modificadas. La nueva versión de este Tratado está ahora a la espera de su ratificación, cosa que no sólo perpetuaría las afectaciones que ya hemos visto, sino que además fortalecería a las empresas frente al Estado mexicano: los Tratados de Libre Comercio estipulan que las empresas pueden demandar ante tribunales internacionales, o paneles externos de solución de controversias, a los Estados parte, si ven afectadas sus inversiones en el país. Esto beneficia claramente a las decisiones de las empresas en nuestro propio país, sin considerar las afectaciones a los derechos humanos. Además, en los llamados “tratados de nueva generación” están previstas las protecciones a los transgénicos y a las nuevas biotecnologías creadas por empresas como Monsanto; de forma tal que aunque la siembra comercial de transgénicos, como el maíz y la soya, esté hasta la fecha prohibida de manera precautoria en nuestro país, los alimentos genéticamente modificados pueden entrar a las mesas mexicanas, sin que las empresas proporcionen información sobre su contenido. No menos importante, por lo perjudicial que resulta para la salud, es el uso de agrotóxicos, particularmente plaguicidas altamente
Treinta años del Frayba

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] En un contexto político como el de ahora hacer memoria de nuestras organizaciones, inspiradas muchas de ellas en las espiritualidades liberadoras, nos ayuda a entender el presente desde la comprensión de nuestra historia en la defensa de los derechos. [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] Sábado 06 de abril de 2019 Miguel Concha El obispo Samuel Ruiz García fue sensible y visionario al fundar en 1989 un espacio de defensa de derechos humanos en la diócesis de San Cristóbal de las Casas: el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, conocido familiarmente como el Frayba. Desde entonces, este centro atendió las necesidades más sentidas de las comunidades indígenas de la región de los Altos de Chiapas, aportándoles solidaridad, información y acciones efectivas en la defensa de sus derechos. Vale la pena citar partes de la Carta Fundacional del Frayba, pues no sólo se trata de una declaración de principios, sino sobre todo de un camino a seguir en y con los pueblos. Con aquellas y aquellos que históricamente han sido excluidos. El Frayba se entiende, pues, como sujeto de su propio destino, aprendiendo a caminar en su lucha de resistencia y en la construcción de la esperanza los caminos de la liberación que caminaron nuestros antepasados. Y es que su andar se articula con El Caminante, es decir, con el propio don Samuel, quien sin reparo alguno se colocó al lado de los más pobres. Él, con la Iglesia liberadora, leyó acertadamente los signos de los tiempos. En ese entonces, cuando creó el Frayba, eran los tiempos de las secretas negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y de las riesgosas reformas al artículo 27 de la Constitución, a punto de concretarse. Eran también los años convulsos por el fraude electoral registrado en 1988 y los de los gobiernos represores en Chiapas y en diversos lugares de la República Mexicana. Fue en ese contexto cuando don Samuel vio la necesidad de generar un espacio institucional para la defensa de los derechos humanos. Treinta años después El Caminante continúa vivo en el Frayba, y quienes han colaborado y ahora colaboran en este centro de derechos humanos, han contribuido con su dedicación y entrega al trabajo colectivo por la justicia, la dignidad de los pueblos y los derechos humanos. En un contexto político como el de ahora hacer memoria de nuestras organizaciones, inspiradas muchas de ellas en las espiritualidades liberadoras, nos ayuda a entender el presente desde la comprensión de nuestra historia en la defensa de los derechos. Y así tenemos que conforme pasan las décadas se desarrolla una particular mística en el acompañamiento a pueblos y comunidades, en el caminar junto a las víctimas, en la defensa de sus derechos y en el entretejido de organizaciones locales y de base que buscan hacer de este mundo un lugar más solidario y digno. Un lugar donde se cuida toda forma de vida, frente al criminal y depredador sistema capitalista. El Frayba es un emblemático ejemplo de esta mística en la defensa de los derechos humanos. Retomando de nuevo su Carta Fundacional, en el Frayba sus integrantes se saben, desde sus orígenes, seguidores de esa mística emancipadora, pues su andar, comprometido en las luchas de liberación, y en la tradición de una Iglesia involucrada en la situación de los pueblos excluidos y marginados, destinatarios del anuncio de liberación y constructores de alternativas al sistema de muerte, está marcado con la visión de la esperanza. (Pueblos) desde el principio sujetos de derechos y en búsqueda de la paz con justicia y dignidad de la mano. Estos 30 años han sido ejemplo de cómo, siendo sensibles a las demandas de las comunidades, se viven los derechos desde abajo. Y de cómo solidarizarse haciendo vivas las propuestas alternativas que ellas nos presentan frente a la crisis de civilización en el mundo. Las y los compañeros del Frayba no dudan en asegurar que los derechos humanos son una herramienta fundamental para el fortalecimiento de procesos organizativos en la defensa y el ejercicio de un proyecto de vida en el que se construyen alternativas frente a la exclusión y marginación de este sistema patriarcal y capitalista neoliberal. Por lo que también declaran estar en contra de la cultura de violencia que éste nos impone. Desde esta mística de la liberación, la historia de nuestras organizaciones defensoras de derechos humanos nos alienta a que vengan muchos más años de trabajo. Hasta que la justicia sea una realidad. Hasta que se reviertan las estructuras de dominación y cesen las violaciones de derechos humanos. Mientras exista la injusticia y la violencia, nuestro trabajo no claudicará. Además, estos 30 años del Frayba también coinciden con la celebración de una década de trabajo de la organización Voces Mesoamericanas, y con la realización de la 58 Asamblea de la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los derechos para Todas y Todos. Dadas las denuncias en el contexto del #MeToo, en dicha asamblea las organizaciones acordaron un total rechazo a la violencia contra las mujeres y la salvaguarda de sus derechos (https://t.co/0EwuArBgSc). Celebremos estos 30 años del Frayba. Celebremos la vida y nuestros esfuerzos colectivos autónomos, materializados en las organizaciones sociales que luchan dignamente contra toda dominación patriarcal, capitalista y colonial. Consultar artículo en La Jornada. Imagen destacada : CDHVitoria [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_PostCarousel_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget]
Foro: La nueva relación gobierno-sociedad en la 4T

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] El Foro: La Nueva relación gobierno-sociedad en la 4T busca realizar un debate entre actores de la sociedad civil sobre el trayecto, entorno, aportes y desafíos de las OSC orientados a generar escenarios y estrategias para una nueva relación sociedad-gobierno, en el marco de la gobernabilidad democrática. Tendrá un formato de plenarias y mesas temáticas donde abordaremos la trayectoria y aportes de las OSC en México, los derechos humanos y la igualdad, el marco jurídico e institucional, el marco regulatorio fiscal y los niveles y mecanismos de participación de la sociedad civil y la ciudadanía. 09 de abril del 2019 📅 10 hrs 🕒 Centro Universitario Cultural (CUC) Odontología 35 Col. Copilco-Universidad 📌 [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_GoogleMap_Widget»][/siteorigin_widget]
Carta abierta : Sobre elección de titularidad de CAV-CDMX

Emmanuel Vargas Presidente de la Comisión de Atención Especial a Víctimas H. Congreso de la Ciudad de México El Observatorio Ciudadano sobre Derechos de las Víctimas reconoce los recientes esfuerzos realizados por el Congreso de la Ciudad de México para avanzar en una mejor implementación de la Ley de Víctimas en la Ciudad de México, particularmente la publicación el 31 de enero pasado de la convocatoria para la elección de la terna de personas candidatas para ocupar la titularidad de la Comisión de Atención a Víctimas de la Ciudad de México (CAV-CDMX). Desde hace algunos meses, este Observatorio ha insistido en la importancia de establecer un proceso transparente, incluyente y participativo para la selección de la terna de personas candidatas a la titularidad de la CAV-CDMX, asegurando una valoración pública y objetiva de los criterios de elección de la terna que será enviada a la Jefa de Gobierno, para la designación de la persona titular de la Comisión. En este sentido, y conforme en los principios del Parlamento Abierto, solicitamos atentamente a las Comisiones Unidas de Atención a Víctimas y la de Derechos Humanos garantizar el derecho de acceso a la información de las y los ciudadanos transparentando la metodología y citerios que se utilizaron para la valoración de los perfiles y selección de la terna, más allá de los requisitos mínimos de elegibilidad que marcan la ley y la convocatoria. El Observatorio Ciudadano sobre Derechos de las Víctimas es una coalición conformada por más de 110 organizaciones civiles, colectivos de víctimas y personas expertas del país interesadas en promover una efectiva implementación de la Ley General de Víctimas y el fortalecimiento de las instituciones encargadas de la atención a Víctimas, tanto a nivel federal como en las entidades federativas. Sin más, esperamos atienda la solicitud aquí manifestada FIRMANTES Organizaciones civiles IDHEAS, Litigio Estratégico en Derechos Humanos; Comisión Mexicana para la Defensa y Promoción de los Derechos Humanos; Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria OP; Comisión Ciudadana de Derechos Humanos del Noreste; Documenta, Análisis y Acción para la Justicia Social; Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos; Todos los Derechos para Todas y Todos (RED TDT)* Representantes de los colectivos de familiares de personas desaparecidas Asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Víctimas de violaciones a los Derechos Humanos en México (AFADEM); Alondras Unidas en Búsqueda y Justicia de Nuestros Desaparecidos; Colectivo de Familiares Amigos Desaparecidos de Tamaulipas; Colectivo de Familiares en Búsqueda de Desaparecidos María Herrera; Colectivo Madres Igualtecas en Busca de sus Desaparecidos; Colectivo Voces Unidas por la Vida, Sinaloa; Deudos y Defensores por la Dignidad de Nuestros Desaparecidos, Estado de México; Familias de Acapulco en Busca de sus Desaparecidos, Guerrero; Familias Desaparecidos Orizaba-Córdoba; Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos, Jalisco; Familias Unidas, Coahuila; Familias Unidas de Nayarit; Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos Nuevo León: Guerreras en Busca de Nuestros Tesoros. Nos Hacen Falta; Solecito de Veracruz; Uniendo Esperanzas, Estado de México. *Integrantes de la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos “Todos los Derechos para Todas y Todos”: Academia Hidalguense de Educación y Derechos Humanos A.C. (ACADERH); Agenda LGBT (Estado de México); Alianza Sierra Madre, A.C. (Chihuahua); Asistencia Legal por los Derechos Humanos, A.C. (AsiLegal) (Ciudad de México); Asociación Jalisciense de Apoyo a los Grupos Indígenas, A.C. (AJAGI) (Guadalajara, Jal.); Asociación para la Defensa de los Derechos Ciudadanos “Miguel Hidalgo” (Jacala Hgo.); Bowerasa, A.C. “Haciendo Camino” (Chihuahua, Chih.); Casa del Migrante Saltillo (Saltillo, Coah.); Católicas por el Derecho a Decidir, A.C. (Ciudad de México); Centro “Fray Julián Garcés” Derechos Humanos y Desarrollo Local, A. C. (Tlaxcala, Tlax.); Centro de Apoyo al Trabajador, A.C. (CAT) (Ciudad de México); Centro de Derechos de la Mujeres de Chiapas (San Cristóbal de Las Casas, Chis.); Centro de Derechos Humanos “Don Sergio” (Jiutepec, Mor.); Centro de Derechos Humanos “Fray Bartolomé de Las Casas”, A. C. (San Cristóbal de Las Casas, Chis); Centro de Derechos Humanos “Fray Francisco de Vitoria O.P.”, A. C. (Ciudad de México); Centro de Derechos Humanos “Fray Matías de Córdova”, A.C. (Tapachula, Chis.); Centro de Derechos Humanos “Juan Gerardi”, A. C. (Torreón, Coah.); Centro de Derechos Humanos “Miguel Agustín Pro Juárez”, A. C. (Ciudad de México); Centro de Derechos Humanos de la Montaña, Tlachinollan, A. C. (Tlapa, Gro.); Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (Chihuahua); Centro de Derechos Humanos de los Pueblos del Sur de Veracruz “Bety Cariño”, A.C. (Tatahuicapan de Juárez, Ver.); Centro de Derechos Humanos Digna Ochoa, A.C (Tonalá, Chis.); Centro de Derechos Humanos Paso del Norte (Cd. Juárez, Chih.); Centro de Derechos Humanos Toaltepeyolo (Orizaba, Veracruz); Centro de Derechos Humanos Victoria Diez, A.C. (León, Gto.); Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero (CDHZL) (Estado de México); Centro de Derechos Indígenas “Flor y Canto”, A. C. (Oaxaca, Oax.); Centro de Derechos Indígenas A. C. (Bachajón, Chis.); Centro de Investigación y Capacitación Propuesta Cívica A. C. (Propuesta Cívica) (Ciudad de México); Centro de Justicia para la Paz y el Desarrollo, A. C. (CEPAD) (Guadalajara, Jal.); Centro de los Derechos del Migrante (Ciudad de México); Centro de Reflexión y Acción Laboral (CEREAL-Guadalajara) (Guadalajara, Jal.); Centro Diocesano para los Derechos Humanos “Fray Juan de Larios”, C.c.p. Nashieli Ramírez, Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal. A.C. (Saltillo, Coah.); Centro Juvenil Generando Dignidad (Comalcalco, Tabasco); Centro Kalli Luz Marina (Orizaba, Ver.); Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) (Ciudad de México); Centro Mujeres (La Paz, BCS.); Centro Regional de Defensa de DDHH José María Morelos y Pavón, A.C. (Chilapa, Gro.); Centro Regional de Derechos Humanos “Bartolomé Carrasco”, A.C. (BARCA) (Oaxaca, Oax.); Ciencia Social Alternativa, A.C. KOOKAY (Mérida, Yuc.); Ciudadanía Lagunera por los Derechos Humanos, A.C. (CILADHAC) (Torreón, Coah.); Colectivo contra la Tortura y la Impunidad (CCTI) (Ciudad de México); Colectivo Educación para la Paz y los Derechos Humanos, A.C. (CEPAZDH) (San Cristóbal de Las Casas, Chis.); Comisión Ciudadana de Derechos Humanos del Noroeste (Mexicali, Baja California); Comisión de Derechos Humanos y Laborales del Valle de Tehuacán, A.C. (Tehuacán, Pue.); Comisión de Solidaridad y Defensa de los Derechos Humanos, A.C. (COSYDDHAC) (Chihuahua, Chih.); Comisión Independiente de
Foro Xalapa : En búsqueda de nuestras y nuestros desaparecidos

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] En #LaEscuelita 🌱de Juventudes Defensoras de Veracruz invitamos al segundo Foro de esta generación, dedicado a compartir en colectivo sobre una de las problemáticas más dolorosas que atraviesa nuestro estado de Veracruz: la desaparición forzada, así como la lucha encabezada por las familias. 13 de abril 📅 | #Xalapa 📍 | 11 hrs 13 de abril del 2019 La casa de nadie | Calle José Joaquín Herrera 23, Zona Centro Xalapa, Veracruz [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_GoogleMap_Widget»][/siteorigin_widget]