Foro “Por la Construcción de un Nuevo Modelo Agroalimentario”

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] Integrantes de la Campaña Nacional Sin Maíz No Hay País se reunirán el próximo 8 de abril, en el “Foro por la Construcción de un Nuevo Modelo Agroalimentario con Alimentos Campesinos para todas y todos” con la intención de sumar propuestas, acciones concretas y políticas públicas que coadyuven a la construcción de un nuevo modelo agroalimentario en México. 08 de abril 📅 | El Altillo (Av. Universidad 1700, Santa Catarina, 04010 Ciudad de México, CDMX) 📍 | 09 hrs IMPORTANTE : Entrada previo registro en el sitio 08 de abril del 2019 | 09 hrs Av. Universidad 1700, Santa Catarina, 04010 Ciudad de México, CDMX [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_GoogleMap_Widget»][/siteorigin_widget]
Empoderamiento ciudadano

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] Los cuarenta años que cumple este año el Centro de Estudios Sociales y Culturales Antonio de Montesinos A.C. (CAM) han significado un caminar que apuesta por el derecho a la participación ciudadana, esperanzadora y siempre abierta a los desafíos que la realidad compleja de México plantea cada día. [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] Sábado 16 de marzo de 2019 Miguel Concha Año de 1510. Desembarca en la isla La Española, hoy Santo Domingo, la primera comunidad de frailes dominicos. Entre ellos viene Fray Antón de Montesinos. Llegan a evangelizar a las tierras recién descubiertas. Al arribar les impacta la terrible situación en la que están los indios. Bajo el sistema de la encomienda (grupo de indios encomendados a un español) son tratados con brutalidad, desgastados, expoliados, esclavizados. Esta injusticia estructural causa sufrimiento y muerte. Pensando y actuando antisistémicamente, Montesinos denuncia, a nombre de su comunidad, que no hay religión ni fe ni creencia que legitime y justifique esta barbarie. Y lanza su famoso grito: “¿Con qué derecho…?”. El Centro de Estudios Sociales y Culturales Antonio de Montesinos A.C. (CAM) cumple en este 2019 cuarenta años de lucha y anhelo por construir una sociedad justa, equitativa y solidaria, donde viviendo en auténtica fraternidad quepan todos los seres humanos. Siempre con una mirada que considera a la par de una ética liberadora, cuya raíz es el cristianismo de liberación, y la perspectiva de género como eje transversal a los derechos humanos como el trasfondo profundo de su quehacer. El CAM ya ha recorrido un largo camino en el fortalecimiento de sujetos sociales, para que sean ellos quienes decidan y construyan de manera digna su vida y su porvenir. Su metodología ha consistido en proporcionar herramientas formativas y capacitación para que diversos actores sociales adquieran habilidades y destrezas para gestionar las necesidades vitales que les permiten un buen vivir en las diferentes dimensiones de su existencia: síquica, social, económica, política, cultural y espiritual. Esto es lo que llamamos reconocer y fortalecer el poder de las personas para actuar en sus comunidades como ciudadanos que aportan ideas y estrategias para la incidencia en lo público y en las políticas que abonan al buen vivir y al bien común, a nivel comunitario, municipal y estatal. Así, el CAM ha sido un actor civil que ha colaborado en el impulso a la democracia representativa que en las décadas de los años 60 y 70 se fue conquistando como elemento radicalmente importante para el ejercicio del derecho a la participación política y social. El derecho a la participación en el ámbito público hace que los actores puedan contribuir en el diseño, seguimiento, implementación y evaluación de las políticas públicas. En los años 90 fue una de las organizaciones que, junto con muchas otras, aportó a la formación y capacitación de actores sociales y civiles comprometidos con la lucha por el ejercicio de la democracia, participando junto con ellos en articulaciones que ayudaron a la transición democrática. Entre ellas, Alianza Cívica y el Movimiento Ciudadano por la Democracia. Sin esta lucha histórica, hoy tendríamos una ciudadanía resquebrajada, insignificante y considerada sólo como beneficiaria. Ha coadyuvado en ese mismo sentido para que las mujeres reconozcan sus derechos y luchen por el ejercicio de los mismos, tanto en sus propios hogares como en sus comunidades, logrando, por ejemplo, colocar regidoras de equidad de género en sus municipios. También ha logrado que grupos de campesinos intercambien saberes para el desarrollo de proyectos sustentables en lugares donde falta el agua; donde existe contaminación de las tierras, y donde el deterioro del campo ha causado su abandono por las nuevas generaciones para buscar oportunidades en las ciudades. Y en relación con actores eclesiales (personas creyentes vinculadas orgánicamente a grupos u organizaciones de iglesias), el CAM es una de las organizaciones civiles que desde su fundación ha aportado reflexión ética y teológica, así como estrategias prácticas para que grupos y comunidades, cuya inspiración de sentido está fundamentada en el cristianismo, puedan articular una fe con sentido transformador y liberador con las dinámicas sociales, políticas y culturales. Articulación que se hace siempre respetando la laicidad y la secularidad de los procesos civiles, de modo que su acción no sea desde la confesionalidad, sino desde el compromiso ciudadano, ético liberador y humanista. En los últimos años el CAM se ha especializado en la prevención de la trata de personas con fines de explotación sexual, elaborando informes con la finalidad de incidir en la política pública sobre el fenómeno. Así lo ha venido haciendo, tejiendo para ello alianzas estratégicas y participando en el Programa de Derechos Humanos de la Ciudad de México con el fin de que se dé cumplimiento a las líneas de acción de dicho programa, y con ello se pueda erradicar este fenómeno que va en aumento en nuestro país y afecta sobre todo a mujeres, niños y niñas. Cuarenta años han significado un caminar que apuesta por el derecho a la participación ciudadana, esperanzadora y siempre abierta a los desafíos que la realidad compleja de México plantea cada día. El CAM ya es parte de esta historia de búsqueda de un México con paz, y en justicia, derechos y dignidad. Consultar artículo en La Jornada. Imagen destacada : CAM [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_PostCarousel_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget]
¡Resiste! Congreso Internacional: Violencias, Resistencias y Espiritualidades

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] La revista internacional de teología Concilium ha sido una de las principales publicaciones de teología moderna. Promueve anualmente, un congreso teológico internacional que suscita nuevas cuestiones y diálogos críticos que nutren una renovada reflexión teológica pertinente para el contexto local, regional y mundial. El congreso de 2019 se realizará del 28 al 30 de mayo en Ciudad de México con el tema: “Espiritualidades y resistencias contextuales frente a las violencias globales”. De esta manera, se busca nombrar en este contexto, las violencias globales contemporáneas y analizar sus impactos en las distintas esferas de la vida personal y colectiva, así como reconocer la convergencia de espiritualidades diversas que, también como formas de resistencia, están constituyendo alternativas de acción y de pensamiento en el mundo, en diálogo constante con los “otros saberes” o saberes descolonizados. INSCRIPCIONES del 28 al 30 de mayo Universidad Iberoamericana CDMX y Centro Universitario Cultural (CUC) [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_GoogleMap_Widget»][/siteorigin_widget]
Desde algunos espacios de la sociedad civil, para el señor presidente

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] Es preciso se identifique que algunas OSC –a nivel local y nacional– se han caracterizado por ser espacios de encuentro y diálogo; por acompañar procesos emancipatorios a lo largo de los años; por construir alternativas de solución ante la complejidad social; por generar vínculos profundos con y entre las comunidades; y por abonar a la recuperación del tejido social. [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] 15 de marzo de 2019 Por: José A. Rosano, Vidal oliver, Lorena D Quintana y Viridiana Martínez En la década de 1980, las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) empezaron a constituirse con más auge, especialmente tras el terremoto de 1985, hecho que les permitió situarse y observar que, juntas y organizadas, podrían incidir críticamente para colocar en las discusiones –locales y nacionales– problemáticas que habían sido históricamente invisibilizadas. Con el paso de los años, las OSC comenzaron a tener implicaciones directas sobre personas, grupos y comunidades, adquiriendo sentido a través de las experiencias y sentires de una sociedad mexicana, que, poco a poco, encontró en estos espacios defensa, acompañamiento en la denuncia pública, incidencia y visibilidad de los actos dirigidos a las poblaciones en situación de vulnerabilidad. Al llegar la década de 1990, con los ánimos del levantamiento zapatista y la entrada emblemática del capitalismo neoliberal con el Tratado de Libre Comercio (TLCAN) a México, las organizaciones mantuvieron la visión ciudadana de esta controversia nacional, sumando esfuerzos entre movimientos sociales, colectivos, activistas y personas defensoras que abogaron por la igualdad de oportunidades, dando pie a la conformación de organizaciones, las cuales interseccionan su labor para ser, pensar y actuar por la exigencia y garantía de los derechos humanos, la dignidad y el respeto de todas las formas de vida. A pesar de ello, no fue sino hasta 2004 que en el periodo del entonces titular del Ejecutivo, Vicente Fox Quezada, con todo y su conservadurismo, se logró promulgar la Ley Federal de Fomento a las Actividades por las Organizaciones de la Sociedad Civil, que no sólo otorgó reconocimiento legítimo a la labor profesional y sistemática de las OSC, sino que formuló un cuerpo normativo que delimitó su actuar con fines meramente sociales. Si bien es cierto que la profesionalización de las OSC a nivel nacional ha sido lenta –en comparación con las manifestaciones de la sociedad civil internacional– también es igual de cierto que han dado pauta para reconocer que las y los mexicanos podemos consolidar procesos de prevención, atención, acompañamiento, defensa de derechos humanos, evaluación, diagnóstico e incidencia política, lo que las convierte en protagonistas sociales y políticas de gran trascendencia y, sobre todo, en portavoces directas de la ciudadanía. No obstante todo esto último, en días recientes se ha instalado en la discusión pública nacional un discurso que transgrede y descalifica la labor de las OSC: el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, anunció la desaparición de algunos de los programas emblemáticos como el Programa de Coinversión Social, es decir, el Programa de Subsidio Federal Único hacia las OSC, lo cual, entre otras cosas, ha intensificado percepciones de desconfianza hacia las OSC, porque se las ha caracterizado como “oportunistas políticas”, “cero profesionales”, “actoras intermediarias”, “desconocedoras de la realidad social” (e incluso se ha criminalizado su actuar como defensoras de derechos humanos). Y aunque se han sumado iniciativas como #SíConLasOSC, así como otras campañas donde se está dando a conocer el arduo, complejo y profesional trabajo de muchas de las OSC (el cual representa, además, el 3 por ciento del producto interno bruto, según lo reportado por la asociación Alternativas y Capacidades, AC, en 2019), la óptica gubernamental-federal se niega a verlas como posibles coadyuvantes y acompañantes legítimas de la población mexicana. Por lo anterior, lanzamos una pregunta al actual presidente de la República y al gobierno federal: ¿el Estado cuenta con las herramientas necesarias para hacer a un lado a las OSC? Para que respondan este cuestionamiento de una manera crítica y adecuada, creemos indispensable que, al menos: Se vea la historia y se haga memoria sobre el papel verdadero de algunas OSC en el país (que, dicho sea de paso, va muchísimo más allá de gestionar recursos económicos); muchas de ellas, por supuesto, surgidas desde las izquierdas latinoamericanas. Se identifique que algunas OSC –a nivel local y nacional– se han caracterizado por ser espacios de encuentro y diálogo; por acompañar procesos emancipatorios a lo largo de los años; por construir alternativas de solución ante la complejidad social; por generar vínculos profundos con y entre las comunidades; y por abonar a la recuperación del tejido social. Se deje de presumir y aseverar, de forma irresponsable, que todas las OSC son de tal o cual manera sin antes examinar la diversidad de ellas, ya que no existe un solo tipo de OSC. Se contemple la diversidad de problemáticas estructurales que amenazan el ejercicio de los derechos humanos de diversos grupos poblacionales, entre éstos, las juventudes que de forma sorora y solidaria (como es el caso de quienes firmamos este artículo), deciden pese a las barreras institucionales y sociales involucrarse a través de las OSC en la búsqueda de mejoras de su realidad social y en la de otras personas. Es primordial, entonces, conservar una memoria histórica ante los logros de las OSC, plasmados en programas y políticas públicas que han coadyuvado al bienestar social, no sólo de personas jóvenes, sino también de niñas, niños, adolescentes, personas con discapacidad, mujeres, población LGBTI+, población en situación de calle, grupos de campesinos, campesinas e indígenas, entre muchas otras, que ahora se encuentran en riesgo e incertidumbre por las descalificaciones generalizadas sin mayor fundamento y por los recortes presupuestales, que, para numerosas OSC, son apoyos fundamentales que permiten la realización de sus proyectos, los cuales no buscan otra cosa más que fortalecer y generar condiciones ligadas al bienestar social. Finalmente, repensar, escuchar y considerar todas las variables en esta discusión sobre las OSC, permitirá al señor presidente y al gobierno federal reconocerlas como personajes clave en el momento que ocurre en el país y
OSC llaman a autoridades mexicanas a fortalecer diálogo que permita la implementación de recomendaciones del Examen Periódico Universal
Recomendaciones realizadas deben retomarse para atender crisis de DH en el país. Necesaria la cooperación del Estado y diálogo con organizaciones para implementar y evaluar efectividad de medidas. Resalta la vulnerabilidad de periodistas y personas defensoras en organizaciones y colectivos de defensa de los derechos humanos y trabajo comunitario. Por tercera ocasión, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU realizó una revisión sobre el escenario actual del país con el fin de emitir una serie de recomendaciones que permitan abordar las preocupaciones internacionales fundamentales en materia de derechos humanos y facilite a las autoridades articular propuestas que atiendan la situación crítica que enfrenta México en la materia. Si bien, la cooperación del Estado mexicano queda de manifiesto al aceptar las recomendaciones emitidas por otros países, resalta nuestra preocupación por la extrema vulnerabilidad de personas defensoras de derechos humanos agrupadas en diversidad de organizaciones de la sociedad civil (OSC), colectividades y movimientos, ante la falta de reconocimiento que ha tenido el nuevo gobierno y el Presidente Andrés Manuel López Obrador al referirse al trabajo que realizan en el país, situación que contrasta con el llamado reiterado de al menos 40 países para fortalecer los mecanismos de protección y las actividades de promoción y defensa. Es tarea también de las nuevas autoridades, de forma institucional, en todos sus órdenes y niveles fortalecer la legitimidad y facilitar las herramientas para multiplicar las tareas de defensa de los derechos humanos y la democracia que éstas organizaciones realizan. Por otro lado, buena parte de las recomendaciones realizadas por otros países están relacionadas con la violencia contra las mujeres y el alarmante crecimiento de feminicidios. En virtud a ello, se ha recomendado implementar medidas que fortalezcan la investigación de los delitos, la reparación a las víctimas y la revisión de la efectividad del Mecanismo de las Alertas de Violencia de Género con la intención de hacer reales su objetivo primordial: atender de manera urgente, pero también estructural, la violencia feminicida en México. En relación a los megaproyectos, las recomendaciones apuntan a que representan un riesgo mayúsculo para la tierra y territorio de los pueblos indígenas. Las consultas implementadas para avalarlos no cumplen con los requisitos necesarios para considerarse libres, previas e informadas y no contemplan el daño irreparable a ríos, bosques y fauna a los pueblos. Las autoridades de la nueva administración dan un buen primer paso al reconocer la grave crisis en la materia que se vive, situación que permitirá caminar en conjunto con las organizaciones de la sociedad civil por la implementación y evaluación efectiva de las recomendaciones de esta evaluación e incorporarlas a la agenda que enfrente de forma contundente la violencia y contexto de graves violaciones a derechos humanos en México. ATENTAMENTE: ORGANIZACIONES Centro de Derechos Humanos “Fray Francisco de Vitoria O.P” A.C. Comité de Derechos Humanos Ajusco. Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad A.C. Convergencia de Organismos Civiles A.C. DECA Equipo Pueblo A.C. Equis: Justicia para las Mujeres A.C Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la Justicia Social A.C. Instituto de Estudios Obreros “Rafael Galván” A.C. Instituto de Liderazgo Simone de Beauvoir. Red Mexicana de Investigadores de la Sociedad Civil. Serapaz A.C. Sin Fronteras IAP. PERSONAS Adelita San Vicente Tello. Carlos Ventura Callejas. David Peña Rodríguez Emilienne de León Aulina. Jorge Fernández Souza. Karla Micheel Salas Ramirez. Manuel Canto Chac. Manuel Canto Chac. Pilar Berrios Navarro.
40 Periodo de sesiones del Consejo de DH de la ONU | Participación de Dominicans for Justice and Peace y CDHVitoria

Declaración oral en el marco del 40º periodo de sesiones del Consejo de Derechos Humanos en Ginebra, Suiza, presentada por el CDHVitoria y Dominicans for Justice and Peace, organización con carácter consultivo ECOSOC, con motivo del documento final del Tercer Examen Periódico Universal a México. Gracias, Sr. Presidente del Consejo de Derechos Humanos Agradecemos la participación de México en el EPU, y reconocemos la apertura del gobierno frente a las numerosas recomendaciones y su próxima implementación. Acogemos también el compromiso del gobierno a mejorar el acceso a la justicia y a fortalecer el combate contra la impunidad. Sin embargo, a partir de los asuntos referidos en relación con las recomendaciones[1] sobre el reconocimiento y garantía de la importante labor que realizan las personas defensoras de los derechos humanos y sus organizaciones, a favor de los derechos de las personas y grupos en mayor situación de vulnerabilidad, consideramos que en el contexto actual del país es necesaria una colaboración efectiva, participativa y respetuosa entre el Estado y sus instituciones con las personas defensoras, sus organizaciones civiles, y sus procesos de articulación y exigibilidad de derechos humanos. Reafirmamos la importancia de que el Gobierno establezca un diálogo franco y propositivo con las organizaciones civiles para generar un ambiente propicio para la defensa, protección y promoción de los derechos humanos, reconociendo también el aporte histórico de esta labor en la vigencia de los derechos y en la democratización del país. Muchas gracias ANTECEDENTES : Durante la sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU se conoció de las observaciones, conclusiones y compromisos del Estado mexicano respecto a las recomendaciones del 3er ciclo del Examen Periódico Universal (EPU). Dominicos por la justicia y la paz (Dominicans for Justice and Peace O.P.) y el Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria O.P. A.C. anteriormente contribuyeron, junto a otras colectividades y organizaciones, a brindar insumos que sirvieron de base al examen, dicho documento puede consultarse en el enlace. [1] Recomendaciones 15, 36, 78, 79, 112, 125 y 135. Confróntese en el Informe del Grupo de Trabajo sobre el Examen Periódico Universal de México https://documents-dds-ny.un.org/doc/UNDOC/GEN/G18/447/02/PDF/G1844702.pdf?OpenElement Imagen destacada : UN HRC
2do Encuentro Internacional de Defensores y Víctimas de Graves Violaciones a los Derechos Humanos “Por la construcción de una justicia transicional que considere a todas las víctimas de México”Por una verdadera justicia para todas las víctimas del país»
[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] Como resultado de la persistencia y de la lucha por la búsqueda de la justicia, los familiares de las víctimas y los sobrevivientes de la violencia en el mes de noviembre pasado organizaron el 1er Encuentro Internacional, mismo que se desarrolló los días 19, 20 y 21 de noviembre de 2018 en Asunción Nochixtlán, Oaxaca. Puedes conocer más de este encuentro aquí. Para dar continuidad a este esfuerzo, se hace la extensiva invitación para que nos sumemos a construir el 2do Encuentro Internacional de Defensores y Víctimas de Graves Violaciones a los Derechos Humanos, mismo que se realizara en Arantepacua, Michoacán, los días 3, 4 y 5 del mes de abril del presente año; conmemorando también el segundo aniversario luctuoso, a dos años de la represión vivida en el 5 de abril de 2017 en la comunidad de Arantepacua, Michoacán. Visita el micrositio para conocer los detalles Ilustraciones : Anacoreta 02, 04 y 05 de abril del 2019 Arantepacua, Michoacán [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_GoogleMap_Widget»][/siteorigin_widget]
Foro Xalapa : Juventudes en el contexto neoliberal

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] En #LaEscuelita 🌱de Juventudes Defensoras de Veracruz invitamos al primer Foro de esta generación, dedicado a pensar en colectivo sobre la situación de los derechos humanos las juventudes en el contexto neoliberal. Todas y todos invitados. 16 de marzo 📅 | #Xalapa 📍 | 11 hrs 16 de marzo del 2019 Sala de juntas de la Dirección General de Educación Física Estatal. Calle CAyetano Rodríguez Beltrán s/n, Zona Centro. Xalapa, Veracruz [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_GoogleMap_Widget»][/siteorigin_widget]
Las OSC y la democracia en México

[siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget] Es necesario que el Presidente de la República distinga a las OSC que han resistido al neoliberalismo y a los proyectos de muerte, de las organizaciones clientelares o las que impulsaron un campo de golf, que no dejan de ser una excepción y deben, en efecto, rendir cuentas. [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Image_Widget»][/siteorigin_widget] Sábado 09 de marzo de 2019 Miguel Concha Durante el siglo XX losregímenes autoritarios, posteriores a la Revolución tuvieron en el presidencialismo, el partido de Estado y las formas clientelares y corporativas, la fórmula de un control político basado en mucho gobierno, poca sociedad civil y grandes privilegios para pequeños grupos. Este modelo está en los orígenes del enriquecimiento de unos cuantos y la polarización profunda de la sociedad mexicana, a tal grado que en 2019 un puñado de 10 personas tiene en su haber lo mismo que ganan en un año 118 millones de personas. En 1981 el modelo económico capitalista de nuestro país empezó a formar parte de la estrategia política y económica del neoliberalismo que a partir de entonces fue acumulando mayor riqueza con base en salarios bajos, sindicalismo corporativo, represión, incremento de la violencia, tolerancia del narcotráfico y creciente corrupción en la administración pública federal. En México el neoliberalismo no implica sólo gobiernos corruptos, sino políticas de enriquecimiento de pocos, represión, desorganización de las oposiciones y destrucción del medio ambiente. Frente a esta política, desde principios de la década de los 60 empezaron a surgir agrupaciones ciudadanas autónomas de gobiernos, iglesias y partidos políticos, interesados en participar en el bien público, para impulsar la promoción de todos los derechos humanos y el cuidado del medio ambiente, que tomaron la forma de asociaciones civiles no lucrativas. Después del movimiento estudiantil de 1968 se multiplicaron los entonces llamados organismos no gubernamentales (ONG) especializados en diferentes campos como la libertad de presos políticos y asociaciones de profesionales para impulsar políticas de salud pública, educación popular y derechos humanos. Entre éstos los derechos de las mujeres, los niños, así como la vivienda popular y asesorías en proyectos productivos, el cuidado del medio ambiente, las culturas indígenas y otros campos de la vida de la sociedad nacional. Estas organizaciones, instituidas entre los gobiernos y los individuos, nunca se situaron en una lógica del llamado clientelismo político, ni como intermediarias de recursos públicos, sino como instrumentos para combatir las causas de la pobreza y generar opciones para mejorar las condiciones de vida, trabajo y el cuidado del medio ambiente, al lado de las organizaciones y movimientos populares y sociales. Desde la promulgación de la Ley Federal de Fomento a las Actividades Realizadas por las Organizaciones de la Sociedad Civil, el 6 de febrero de 2004, aún vigente, el Estado mexicano ha fomentado las actividades de las denominadas OSC mediante recursos aprobados en la Cámara de Diputados que se ejercen conforme a reglas de operación; convocatorias abiertas y transparentes para proyectos de coinversión; dictaminación por órganos tripartitas integrados por gobierno, academia y sociedad civil, sujetos a rendición de cuentas e informes oportunos. Sin embargo, en este periodo los recursos para el fomento de las actividades de las OSC han sido escasos, como lo expresa el Centro de Estudios de la Sociedad Civil de la Universidad Johns Hopkins: sólo el equivalente a la cuarta parte del promedio internacional; a la quinta parte del promedio en los países desarrollados y a menos de la mitad que en las naciones en desarrollo. Aparte del escaso monto de las partidas asignadas a las OSC en el Presupuesto de Egresos de la Federación, 69.4 por ciento fue entregado en 2007 a organizaciones paraestatales y sólo 30.6 por ciento llegó a las verdaderas OSC. Es entonces necesario que el Presidente de la República distinga a las organizaciones de la Sociedad Civil que han resistido al neoliberalismo y a los proyectos de muerte, trabajando sin descanso para impulsar la democracia, el cuidado del medio ambiente, la atención a personas vulnerables y la promoción de los derechos humanos, de las organizaciones clientelares o las que impulsaron un campo de golf, que no dejan de ser una excepción y deben, en efecto, rendir cuentas. El fondo del problema es que las sociedades modernas impulsan con energía las organizaciones intermedias entre gobierno y ciudadanos, precisamente para llevar adelante iniciativas de la sociedad civil que difícilmente pueden ser atendidas por los gobiernos. Organizaciones que instituyen mediaciones profesionales y empáticas con los grupos más vulnerables como migrantes, mujeres violentadas, familiares de personas desaparecidas. Mediaciones que promueven colectivos para impulsar la democracia y el cuidado de la naturaleza y que colocan, siempre en el centro la vigencia plena de los derechos humanos, el cuidado de la naturaleza, el respeto a las personas vulnerables como sujetos de derechos, el agua como derecho humano (no como mercancía), la justicia y la democracia, son contrapesos necesarios para evitar nuevas formas de autoritarismo y corporativismo, buscando siempre abordar las causas de los problemas que han generado tanto la corrupción como el autoritarismo y el neoliberalismo. Consultar artículo en La Jornada. Imagen destacada : CDHVitoria [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_PostCarousel_Widget»][/siteorigin_widget] [siteorigin_widget class=»SiteOrigin_Widget_Headline_Widget»][/siteorigin_widget]
Urgente atender violencia feminicida en la CDMX

-AVGM hoja de ruta para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres. -Medidas ineficientes implementadas y mala gestión de recursos en la administración pasada. -Este 8 de marzo urgimos a Segob a declarar la alerta de género en CDMX. En el marco de la conmemoración del 08 de marzo, misma que nos recuerda la lucha de las mujeres obreras por el reconocimiento de sus derechos laborales y nos impulsa a seguir con nuestras exigencias, es preciso señalar que en México el Estado tiene tareas pendientes. Las últimas cifras señalan que todos los días en México mueren alrededor de 9 mujeres, y 6 de cada diez han sufrido algún tipo de violencia, en razón de lo anterior es de mayor importancia que el Estado tome acciones para erradicar la violencia feminicida. En este sentido, es importante recordar que para la Ciudad de México se hizo una solicitud de Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres (AVGM), desde el pasado 7 de septiembre de 2017, respecto de la cual, las organizaciones peticionarias no conocemos ni hemos recibido el dictamen final. En el informe del grupo de trabajo conformado para atender la solicitud, se menciona que de acuerdo con la información presentada por el Gobierno de la CDMX, de enero de 2012 a septiembre de 2017, se registraron 292 casos de feminicidios y 421 casos de homicidios dolosos contra mujeres. También, según datos de la Procuraduría de Justicia Capitalina arrojan que, de enero de 2012 a septiembre de 2017, se registraron 67,520 casos de violencia familiar; 10,832 de lesiones dolosas; 9,985 de abuso sexual; 3,168 de violación; 586 de acoso sexual; 212 de tortura; 173 de trata de personas y 112 de secuestro. La declaratoria de la alerta de violencia de género en la Ciudad de México es de absoluta relevancia, pues tal y como lo demuestran las cifras, las acciones emprendidas por la administración pasada no han sido eficientes para enfrentar y erradicar la violencia feminicida. Por ello, como organizaciones peticionarios consideramos que el mecanismo de AVGM puede ser una hoja de ruta que permitirá fortalecer las áreas de oportunidad de las instituciones encargadas de prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres. En razón de lo anterior, es importante mencionar que el Gobierno de la Ciudad de México ha invertido, desde la administración pasada, en acciones que debieran estar encaminados para enfrentar y erradicar la violencia feminicida, sin embargo, la realidad es que las mujeres vivimos cada vez más violencia en nuestros entornos. En ese sentido, el gobierno de la Ciudad de México tiene que dar cuenta del presupuesto invertido para enfrentar y erradicar la violencia contra las mujeres, asimismo, la Secretaría de Gobernación del Gobierno Federal, con base en la revisión exhaustiva, no debiera dilatar más la declaratoria de alerta de género para la CDMX. ¡Por mecanismos efectivos y contundentes! ¡Porque nos queremos vivas, libres y sin miedo! ¡Ni una más! ¡Ni una menos! Atentamente: Justicia Pro Persona A.C. Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) Fotografía destacada : Karla Mariana Troncoso